Cuando volamos en avión se producen frecuentes cambios de presión atmosférica que pueden afectar a las estructuras del cuerpo que estén llenas de aire y rodeadas de estructuras rígidas (oídos, cráneo y boca).
Sobretodo durante el despegue y el aterrizaje pueden aparecer cambios de presión en las cavidades que existan en los dientes: bien por presencia de caries o bien por existencia de empastes defectuosos.
La pulpa (el nervio del diente) puede verse afectada por dichos cambios de presión produciendo un intenso dolor dental conocido como barodontalgia.
Presentar cualquier problema dentario sin tratar puede provocar durante el vuelo la aparición de fuertes dolores dentales, por lo que es importante realizarnos una revisión sobretodo antes de vuelos largos.
Para evitar esta complicación te vamos a dar una serie de recomendaciones:
visita a tu dentista para que te examine la boca.
si te has sometido a cualquier cirugía dental, espera como mínimo 24 horas.
evita tomar bebidas calientes o azucaradas durante el vuelo.
Es importante acudir a una revisión antes de comenzar las vacaciones, ya que un dolor de muelas puede amargarnos el viaje.
Pide cita sin compromiso, todas nuestras consultas y revisiones son gratuitas
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